El titular de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, (Cofepris), Alejandro Ernesto Svarch Pérez, aseguró que cumplió con la misión de terminar con la corrupción, la cual ya “no es regla, sino excepción” en el organismo.

“La misión no era sencilla, pues a la par de desterrar la corrupción, de separar el poder político del poder económico, debíamos garantizar que la Cofepris no fuera impedimento para que pudiéramos acceder a tratamientos médicos y servicios de salud de calidad, pero con paciencia, pasión y un sentido de la responsabilidad en un año podemos decir misión cumplida, la corrupción no es regla sino excepción en nuestra institución”.

En La Mañanera desde Palacio Nacional, Svarch Pérez señaló que en conjunto con la Unidad de Inteligencia Naval de la Secretaría de Marina (Semar) se descubrieron mecanismos de corrupción en la Cofepris, donde “en los sótanos, las zonas oscuras operaban redes de corrupción y grupos tenían secuestrada a la agencia”.

Detalló que en el primer sótano físico de tres, había manejo discrecional de solicitudes de empresas en oscuro archivo, “reflejo físico del desorden, el segundo: vigilancia basada en extorción y el tercero: operación directa de la corrupción”.

El titular de Cofepris dijo que se expulsaron a los extorsionadores y con la ayuda de nuevo liderazgo, “limpiamos desde arriba las escaleras y mejoramos los procesos de verificación sanitaria”.

“Ahora es gente honesta y realmente ocupada por la salud. Pusimos orden en el sistema federal y lanzamos la estrategia nacional de buen gobierno (…) Hemos removido a 32 funcionarios desde titulares de unidades administrativas, dictaminados y verificadores, cuyo único propósito era enriquecerse”.

Mencionó que esos funcionarios fueron destituidos por personal en estrictas pruebas en la unidad de Inteligencia Naval, “colocamos en posiciones estratégicas a personal de Marina y en conjunto creamos el centro de inteligencia contra riesgos sanitarios con el objetivo de dotar con seguridad nacional”.

Por ello, aseguró que, “desterrar la corrupción es un proceso que ha sembrado nuestra institución pero podemos tener la tranquilidad que los productos son analizados con criterios técnicos, rigor científico y sin los viejos lastres de la corrupción”.

MILENIO