Ante la calificación de Petróleos Mexicanos (Pemex) emitida por las agencias Fitch Ratings y Moody’s, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) respondió que se trata de una “burla“. Argumentando que la deuda de la empresa paraestatal se ha reducido en más de un 15 por ciento desde el inicio de su administración.

“Es una burla todo esto de las calificadoras. Sin embargo, todavía quedan estos remanentes, toda esta información que utilizaban para manipular en la época del neoliberalismo, neoporfirismo“, respondió López Obrador al ser cuestionado al respecto durante su conferencia mañanera de este lunes desde Palacio Nacional.

Esto siendo que Fitch bajó a Pemex al terreno especulativo con B+, mientras Moody’s lo mantuvo en B1, pero con una perspectiva negativa. “Cuando no solo estaba mal la economía, sino imperaba la corrupción en Pemex y todas las empresas públicas, era muy buena la calificación”, replicó López Obrador.

Deuda de Pemex baja mientras producción e ingresos suben

“Para de una vez desmentir a la calificadora esta, exhibirla como falsaria”, el primer mandatario expuso que la deuda de Pemex se ha reducido en un 15.5 por ciento desde que inició su Gobierno en 2018. A la par que se han incrementado tanto la producción por extracción petrolera como los ingresos por disminuir los costos de refinación.

Bajo estos argumentos sobre las finanzas de Pemex, López Obrador aseguró que esta calificación “no afecta en nada. Es parte de la simulación que existía durante el predominio del modelo neoliberal. Es como, a estas alturas, tomar en cuenta lo que opine el Fondo Monetario Internacional, que está totalmente desacreditado”.

Incluso acusó que “son calificadoras que actúan en función de intereses. Lo peor de todo es que hasta se les tiene que pagar”. Comparando esta situación con la de la categoría 1 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, la cual se mantuvo cuando el Cártel de Sinaloa operaba al amparo de Genaro García Luna, pero se retiró al inicio de su Gobierno

Reporte indigo