Por ese motivo, se considera que su salud ha sufrido un detrimento por lo que constitucionalmente el Estado debe garantizar su salud, pues al mantenerlo en prisión preventiva, son ellos los responsables de su integridad.

El juez dictó un receso de una hora, para preparar los testimonios de los dos testigos, con lo que la defensa busca respaldar la solicitud.

Se nombró a los médicos Mario Valles, Ricardo Molina, quienes presentarán sus argumentos y los motivos por los cuales consideran que es necesario que el imputado pueda llevar su proceso en un lugar externo a la prisión.

Asimismo, días antes, el abogado Juan Carlos Mendoza, adelantó a El Heraldo de Chihuahua, que se buscaría hacer valer el mandato constitucional que determina que una persona no puede pasar más de dos años en prisión preventiva, mientras que César D.J. tiene siete meses encarcelado en Chihuahua y acumuló 19 meses en una cárcel de Miami, Estados Unidos.

De igual forma, se podría presentar como un tercer argumento, la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que determinó que México está violando la libertad y la presunción de inocencia con la aplicación de la prisión preventiva como medida cautelar, en situaciones similares a las que se le ha aplicado al ex gobernador, lo que reforzaría la necesidad de cambiar la medida cautelar.

Para tal efecto, la defensa podría proponer el uso de brazalete electrónico, el arraigo domiciliario o asistir a firmar periódicamente.

Nota publicada originalmente en: El Heraldo de Chihuahua