Selena Gomez protagoniza la portada del mes de abril de la revista Vogue, medio con el que se sinceró y le contó porque canceló su gira, no fue por adicción, un trastorno alimenticio o agotamiento sino porque comenzó a tener “ataques de pánico justo antes de entrar al escenario o inmediatamente después el escenario, estaba deprimida y ansiosa”.
Por lo anterior pasó 90 días en el centro psiquiátrico tomando terapia con un grupo de 7 chicas, incluida ella, lo que describe como “una de las cosas más difíciles que jamás hice en la vida”.
En cuanto a la fama, acepta que era adicta a Instagram, dado que es de las más seguidas y no la enorgullece mas bien “la hace sentir como una mierda”. Por tanto, se alejó un poco de la red social y hasta se olvidó de usar celular; solo dos personas famosas tienen su número telefónico.
Respecto a la escena musical, está tomando clases de español con la esperanza de lanzar música en un futuro.
“Me encanta lo que hago, soy consciente de lo afortunada que soy-, pero realmente no puedo esperar a que la gente se olvide de mí”.
Vía ONTD